Conservar nuestro pasado es proteger nuestro futuro.
Durante las tareas realizadas para la reestructuración del depósito de la Biblioteca escolar, lugar donde se encontraron una infinidad de libros, entre los cuales se halló el documento de los“Planos de Albañilería del Teatro Colón” que actualmente se encuentran en proceso de limpieza, restauración y digitalización.
Con respecto a este hallazgo, rápidamente nos preguntarnos, ¿por qué estaban aquí? ¿Cuál había sido su utilización a lo largo de los años? ¿Cómo habían podido conservarse en tan buen estado? ¿Serían realmente los planos de obra originales de la prolongada construcción del Teatro Colón? Y, sobre todo ¿qué importancia tenían para la cultura y la historia de nuestro país?
Tales interrogantes nos llevaron a profundizar nuestro conocimiento sobre la historia de las Escuelas Técnicas Raggio, sobre todo a indagar con énfasis en las distintas vinculaciones entre el Teatro Colón y la Escuela, llegando incluso a pensar que dichos materiales eran parte del material didáctico utilizado por entonces por distintos docentes y estudiantes de las especialidades de Construcciones, Ebanistería y Herrería Artística, entre otras especialidades. A través de la investigación realizada, nos enteramos que los ex docentes de las Escuela Raggio Federico Federicci y Cayetano Donato, el primero recibido en esta institución en 1936, trabajaron en la construcción y en el mantenimiento de la escenografía del mencionado Teatro Colón.
El documento encontrado se trata de una carpeta cosida de gran formato, que reúne una treintena de copias de planos del año 1892 y llevan cada uno de ellos el sello auténtico del estudio del Arquitecto Víctor Meano. El material no ofrece ningún dato desconocido, pero tiene un gran valor histórico-documental, casi único, porque de estos planos existen copias dispersas, muy pocas y todas en muy mal estado. En cambio, este material está en condiciones admirables desde el punto de la conservación. Sólo unos pocos de ellos han llegado hasta nuestros días, en formato de copias hechas en su momento. Los mismos se hacían en papeles especiales, útiles para el momento, pero de escasa duración y en base a componentes ácidos en el papel. Además, debe subrayarse que, el material encontrado es un conjunto de copias en papel opaco de un original transparente (copias directas o negativas, algunas al ferroprusiato), razones por las que hoy, en pleno siglo XXI, resulta necesario clasificar a estos documentos como "originales". Es decir, copias heliográficas hechas y selladas en el momento: "fuentes primarias" de un alto valor histórico-documental.
Por otro lado, en términos materiales, esta carpeta de láminas encuadernadas tiene un valor de mercado -seguramente alto- y al tratarse de patrimonio del Estado, consideramos que debe ser cuidado con las mismas precauciones de todo documento histórico original. En este caso, para garantizar la estabilidad de su conservación, se ha realizado un trabajo primariamente de resguardo -debidamente estibado-, en el Museo Archivo Lorenzo Raggio, bajo condiciones ambientales, de temperatura y humedad adecuadas, especialmente para que las emulsiones, tintas y papeles no se degraden químicamente más de lo que ya se han degradado. En segundo término, se inició un proceso de restauración del material para asegurar su conservación en cuanto a integridad, realizado en “Las Escuelas Técnicas Raggio” a cargo del Maestro Restaurador, el Lic. Oscar Maisterra, ayudante del Museo Archivo y docente de la Institución en la especialidad Técnicas en Industrias Gráficas. El mismo procedió a la elaboración de un detallado informe en el que se especificaban los materiales necesarios para la adecuada restauración y posterior digitalización del documento.
